Algoma University se enfrentó a un desafío debido al rápido crecimiento de sus tres campus, lo que requirió mayores recursos y procesos renovados para su diverso cuerpo estudiantil. A pesar del aumento del número de estudiantes matriculados y del éxito de los programas, era necesario modificar los sistemas y procesos existentes que habían sido diseñados para una institución con menos estudiantes.